Los stilettos se han convertido en unos de los zapatos protagonistas de nuestro clóset y seguramente tienes más de un par, que son el complemento perfecto para cualquiera de tus outfits.
La palabra stilettos viene de la palabra en italiano stilo, que significa cuchillo, daga o puñal. La traducción en español de esta palabra es aguja, por lo que es por esto que también se le conocen a los stilettos como tacones de aguja.
La historia de estos zapatos tiene sus inicios en el Renacimiento, en donde -tanto mujeres como hombres- utilizaban zapatos de tacón como un símbolo de poder, riqueza y autoridad. Todos usaban estos zapatos como un símbolo de superioridad, pero no fue sino hasta finales del siglo XVIII que los zapatos con tacón empezaron a ser vistos como una representación de la feminidad y de la sensualidad y fue entonces que los hombres dejaron de incorporarlos en su vestimenta.
A partir de que los tacones se usaron como un elemento exclusivamente femenino, su altura empezó a crecer y en los años 50’s se introducen los tacones altos y sumamente delgados. Lo que se buscaba con la creación de los stilettos, era que fuera un accesorio que le diera el apoyo suficiente al pie para que fuera una especie de extension de él, por lo que para lograr esto, se aplicaron técnicas de aeronáutica para su fabricación.
La invención de estos altos zapatos se le reconoce a diseñadores como Salvatore Ferragamo, Roger Vivier y André Perugia. Sin embargo, fue Salvatore Ferragamo el primero que introdujo en sus boutiques y pasarelas una línea con tacones de más de 10 centímetros de altura. Incluso, al aplicar una varilla de metal al tacón, le aportó mayor comodidad y firmeza a los stilettos.
Durante los años 50’s Marylin Monroe ayudó a popularizar los stilettos, ya que gracias a ellos su manera de caminar se volvió mucho más femenina y seductora. En cuestión de segundos, todas querían los zapatos que le daban ese toque tan único a Marylin y, tan solo una década después, se estilizó la punta y ya eran considerados los zapatos del momento. A donde sea que voltearas podías ver a las mujeres llevando sus stilettos con la mayor seguridad.
Como todas las modas llegan para ser sustituídas, el caso de los stilettos llegó en los años 70’s: se introdujeron las plataformas como una antítesis a los zapatos de tacón alto y delgado, que resultaban ser muy incómodos y poco prácticos.
En los años 80’s se estableció el power dressing, estilo que sirvió a las mujeres para abrirse paso dentro del ambiente laboral masculino y fue, de esta manera, que los stilettos volvieron con mayor fuerza. Con un par de tacones de aguja las mujeres podían darle un toque de feminidad y sensualidad a su vestimenta estructurada.
Un ícono de la moda, de los 90’s y principios de los 2000, fue sin duda Carrie Bradshaw y, fue ella junto con sus icónicos zapatos Manolo Blahnik azules, que dio a los stilettos una popularidad especial dentro de la década.
Hoy vemos los stilettos como un sinónimo de feminidad y glamour y son un básico en cualquier colección, ya que pueden darle un toque serio o también divertido. Son elegantes y clásicos y, sin duda, elevarán tu outfit y te darán un toque instantáneo de feminidad y sofisticación.
¿Cuáles son tus stilettos favoritos? ¡Úsalos para que to look sea impactante al instante!
xx, G
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