Consumismo

Dentro del mundo de la moda, el consumismo es un factor del cual somos víctimas día a día. Todos los días, estamos en constante convivencia con un grupo, por lo que -inconscientemente- buscamos ser aceptados. El consumismo y el materialismo forman una parte importante en la sociedad, al ser las cosas materiales vistas como sinónimo de éxito y felicidad.

La sociedad actual nos enseña -erróneamente- que, si tenemos un alto poder adquisitivo valemos mucho más que una persona con poco dinero. Por este pensamiento, es que las personas buscan comprar en las tiendas más prestigiosas y caras para hacerse notar y ser reconocidas como alguien exitoso y feliz. Pero, al buscar solo lo material y lo superficial necesitamos consumir cada vez más sin llegar a alcanzar una verdadera felicidad. Pero al final, debemos comprar solo lo que nos gusta, y no cosas que no necesitamos y que adquirimos solo para buscar la aceptación.

“Esta cultura del usar y tirar, de la moda consumista, en vez de hacernos más felices, nos produce mayor infelicidad”. -José Garrido

“El consumismo promete algo que no puede cumplir: la felicidad universal” -Zygmunt Bauman

La palabra consumidor viene de costumer que quiere decir costume made: hecho a la medida. Lo que la moda busca es satisfacer al consumidor haciéndole creer que necesita un producto y -por ende- termina comprándolo. La moda nos vende la idea y las imágenes de personas con un estilo de vida “perfecto”, haciéndonos creer que si compramos la ropa o los accesorios que están usando, nuestra vida se va a parecer cada vez más a la suya y poco a poco, tras cada compra, nuestra vida se convertirá en igual de “perfecta” que la de ellos.

Hoy, el consumidor se informa antes de comprar y se deja llevar por lo que ve que está de moda en internet y en las redes sociales, entre los bloggers y los influencers, quienes han sido en los últimos años fundamentales para marcar tendencias.

El consumismo va muy de la mano con el fast fashion, ya que al ser estas cadenas las que lanzan nuevas prendas cada semana, nuestro deseo por renovar nuestro clóset y por tener la moda más reciente, nos lleva a nunca dejar de consumir, porque cuando por fin logras comprar eso que tanto querías, a la semana sale un nuevo producto que lo remplaza. Ahí es cuando se ve afectado nuestro comportamiento al comprar, y queremos comprar cada vez más, porque siempre va a haber mas oferta en el mercado y, entre más vemos, más queremos.

Creo que hoy hay más gente que se interesa por la moda por el poder que le ha dado las tiendas de fast fashion. Ya no es necesario comprar en tiendas de lujo para poder tener los objetos que están más de moda, hoy podemos comprar moda a precios mucho más accesibles, lo que nos permite siempre crear las últimas tendencias. Sin embargo, este comportamiento tiene un gran impacto ambiental, social, personal y económicamente y nos afecta en todos los sentidos de nuestra vida.

Pensar cómo compramos tiene mucho más impacto que pensar qué compramos.

El fast fashion, es tema para otro día… ¡espera el post de mañana!

Y tú ¿te consideras consumista?

xx, G